Según un estudio realizado por estudiantes
de primer año de periodismo de la Universidad Miguel Hernández, en 2001 hubo alrededor de 241,43 individuos mayores de 64 años por cada 100 individuos menores de 25
años.
En referencia al número de población total
que se fijaba en 1991 en la Comunidad Valenciana, se conoce que fue de
3.857.243, y, pasados 20 años, esta cantidad ha incrementado a 4.999.208.
Además de aumentar el número de nacimientos en las últimas dos décadas, las
defunciones también lo han hecho y es que, en 1991 fueron 34.336, y en 2011 la
cifra alcanzó las 40.788.
En
cuanto a la esperanza de vida dada en los varones, que es de 74,1 al inicio de
su generación, a medida que va aumentando la edad de la población, disminuye la
esperanza de vida de manera caótica en 2001. Al contrario que los hombres, las
mujeres, desde el momento de su nacimiento cuentan con una esperanza de vida de
79,6, en ese mismo año.
En las mujeres por el contrario, diez años
después, su esperanza de vida no varía, se mantiene estable; sin embargo, en
los hombres, aumenta hasta un 76,9.
Respecto a la tasa bruta de mortalidad
dada entre los años 1991 y 2011, sin tener en cuenta la diferencia entre sexos,
se ha obtenido la cifra de 8,90‰ para el primer año, y 8,16‰ para el último.
También se puede apreciar, basándonos en
la pirámide de población mostrada, que las mujeres viven bastante más que los
hombres a partir de los 65 años de edad, debido a causas diversas como la
menopausia, la resistencia del corazón, y la mejor calidad de vida que éstas
suelen mantener, en líneas generales, ya que los varones son más reacios a
cuidarse de la misma forma. Es así, que, en la mayoría de casos, hablamos de
“viudas” y no de “viudos”.
Como conclusión podríamos decir, que desde
el año 1991 hasta 2011 ha habido mucha más población, ya que las tasas de
natalidad han ido incrementándose conforme han pasado los años al igual que las
tasas de mortalidad, que también han aumentado.
Sin embargo, la esperanza de vida
entre hombres y mujeres es diferente. Las mujeres cuentan con una esperanza de
vida mayor que la de los hombres, de un 79,6 y se mantiene desde el año 1991
hasta 2011. Por el contrario, los hombres han ido aumentando su esperanza de
vida conforme han pasado los años, teniendo en 1991 una esperanza estimada de
74,1 hasta llegar a 76,9 en 2011.